Caminar juntos en comunidad
Con una concurrencia histórica de más de 300 personas, el pasado 22 de abril se celebró un nuevo Día de la Familia. Una instancia de disfrute, celebración y encuentro entre toda la comunidad de Providencia: familias, educadores y chiquilines. “El Día de la Familia es una de las celebraciones más disfrutables de nuestra comunidad, es una oportunidad hermosa para encontrarnos, conocernos, y para seguir construyendo juntos nuestra comunidad educativa”, nos comenta Laura Voituret, directora general. “Y este año además dimos el salto de planificarla en conjunto con todas las comisiones de familias y los equipos de Providencia, así que fue además una oportunidad de seguir tejiendo esta red de trabajo en equipo que venimos fortaleciendo hace años y que es una parte central de nuestra identidad”, continúa Laura. Por su parte Alma, mamá de Zullay, estudiante del Club de Niños y miembro de la comisión de familias, comentó “es una jornada que vale la pena seguir haciendo. Todos participamos por un mismo fin, en comunidad y en comunidad siempre es mucho mejor”.
Como todos los años, el Día de la Familia comenzó con una gran jornada de mantenimiento liderada por la Comisión Mantenimiento, formada por referentes familiares y educadores. “Las comisiones se reunieron varias semanas antes para poder planificar las actividades a realizar, pensar cómo se distribuían las tareas y conseguir los diferentes materiales”, nos cuenta Laura. Estas instancias nos permiten seguir cuidando y mejorando nuestros espacios compartidos. Tuvimos la oportunidad de recuperar algunos lugares, limpiamos, pintamos y reacondicionamos distintos sectores de Providencia. Anthony, estudiante del Centro Juvenil que participó de la jornada junto con su hermana y su cuñado, nos cuenta que hizo “de todo un poco, marqué para pintar la cancha, limpié las hojas, pinté, ordené, cociné para el desayuno”. Luego agregó “vale la pena hacerlo para ayudar a Provi que somos familia, somos familia todos”.
Como gesto transversal, durante la jornada estuvimos armando un telar donde cada grupo de trabajo escribía en una tira de tela algo que valoraban o destacaban del trabajo en grupo que estaban viviendo en el momento. Este entrelazado de valores y sentimientos, que pudimos trabajar y armar juntos, nos acompañó durante todo el día, reconociendo lo valioso de estar todos juntos en comunidad.
Al mediodía, luego de haber finalizado con las diferentes tareas de mantenimiento, tuvimos una segunda parte de la jornada para jugar y compartir. “La jornada tiene una segunda parte donde la propuesta cambia por completo y todo ese trabajo compartido se convierte en la posibilidad de encontrarnos para jugar, disfrutar, comer juntos, divertirnos en familia. Creo que lo más lindo es darnos tiempo para conocernos, ver a las familias y chiquilines jugando todos juntos, es una oportunidad para conocer a los amigos de tus hijos, a los padres de sus amigos, a los educadores y sus familias…Para reconocernos una gran familia, la familia que vamos eligiendo por los vínculos que vamos construyendo”, cuenta Laura. Luego, vino el gran momento del almuerzo: una rica hamburgueseada compartida con opciones incluídas para vegetarianos y celíacos.
Ana María, mamá de Micaela (estudiante del Liceo) y abuela de Brisa y Joel (del Club de Niños), quien también forma parte de las comisiones de familias nos cuenta que “el Día de la Familia es un día que tenemos para intercambiar con otras familias, estar con los chiquilines a la par de nosotros. Hay mucho compañerismo y mucho esfuerzo. Ver que se hace todo eso para Provi, me encanta”.
Para finalizar, contamos con la presencia de una academia de baile Clagim Drembake que nos brindó un gran espectáculo. Paulina, estudiante de séptimo grado del liceo, quien también asiste a la academia, nos compartió su testimonio “la participación de Clagim Drembake fue muy buena, no es una academia de competencia y hacen muchos shows a beneficio, me encanta como colaboran con la gente. Me gustó mucho por Provi también”.
Alma nos comparte que para ella el Día de la Familia “representa solidaridad, compañerismo y, sobre todo, para mí representa agradecimiento. Agradecimiento de mi parte hacia el Club de Niños por todo lo que recibimos”. Luego agrega “destaco el compañerismo y el compromiso de todos los padres que estaban allí”.
En Providencia, el involucramiento familiar es parte fundamental de nuestra identidad y de cómo queremos construir nuestro centro educativo. Apostamos siempre a contar con espacios de participación activa y horizontal junto a las familias. Algunos de estos espacios son: reuniones de referentes familiares,talleres, comisiones de trabajo voluntarias donde participan los referentes familiares en decisiones que tienen que ver con la vida de Providencia (como la Comisión Mantenimiento o Comisión Desayuno).
“En estos encuentros se sintetiza en gran medida nuestra identidad, ese sentimiento de que sin vos no es lo mismo, sin cada uno de nosotros esta comunidad no sería lo que es…y que juntos, con el aporte de todos la construimos y la transformamos. Es por eso que elegimos el gesto del telar, donde cada una de las personas sumaba su hilo que iba tejiendo para construir esa trama que representa lo que somos, un tejido fuerte, donde la originalidad de cada uno le aporta algo único y valioso”, concluye Laura.